miércoles, 18 de abril de 2012

Entrevista

Curiosa entrevista publicada en La Vanguardia el pasado viernes día 13.

Natalia Strozzi: "Mi familia poseía un segundo retrato de la Gioconda pintado por Leonardo"

Un estudio heráldico señala a la joven actriz como descendiente directa de la Mona Lisa, heredera también de la familia rival de los Medici 

Cultura
Natalia Strozzi en su bodega de la Toscana
S. Colomé / J. L. Espejo


Natalia Strozzi es una auténtica principessa. Por sus venas corre la sangre de diferentes familias nobles y poderosas de Italia. La más evidente: la de los Strozzi, enemigos acérrimos de los Medici. Y la más oculta: la de Lisa Gherardini del Giocondo, es decir, la famosa Mona Lisa, según ha constatado el investigador genealogista Domenico Savini. La Gioconda del siglo XXI nada tiene que envidiar a los polifacéticos renacentistas. Empezó siendo bailarina profesional bajo la tutela de Nureyev y ahora es actriz, pianista y alma de la bodega familiar La Hacienda Cusona, con más de mil años de historia, como no podía ser de otra manera.

-¿Pesan mucho todos estos apellidos?
-Es difícil ser una Strozzi, ya que conlleva una gran responsabilidad y un deber: continuar el legado de nuestros antepasados. La gente puede pensar que es fantástico tener una hacienda, pero es mucho más que eso. Conservar el patrimonio cultural e histórico, labrado siglo a siglo, es muy complicado. Piano a piano se pierde la tradición, y nosotros procuramos mantenerla. Por ejemplo, no hay muchas bodegas que tengan más de mil años...

-Y menos con cuadros de los Medici colgados en su comedor... ¿Por qué?
-La familia Medici se extinguió en el siglo XVIII, mientras que nosotros todavía estamos aquí. Ellos pueden ver cómo nos alimentamos. Es como una vendetta.

-Menuda las gastan...
-Los Strozzi eran los más grandes enemigos de los Medici. La única cosa buena que hicieron para nosotros fue beber nuestra Vernaccia, que producimos en la bodega desde el siglo XIII, y que fue cantada por Dante. Los Medici incluso enviaban este vino blanco al Papa.

-Sabían apreciar lo bueno.
-Sí, creo que sí. (Ríe)

-Por si no tenía bastante con ser una Strozzi, ahora resulta que un estudio heráldico ha demostrado que también es descendiente de la famosa Gioconda.
-El profesor Domenico Savini conoce todas las familias italianas de principio a fin. Él llegó a esta conclusión después de un minucioso estudio, pero nosotros ya lo sabíamos por transmisión familiar.

-Explíquese.
-Descendemos de Lisa Gherardini del Giocondo por parte de nuestra abuela paterna. Ella ya lo sabía y siempre nos lo explicaba. Por tanto, para nosotros no fue ninguna sorpresa.

-Pero lo mantenían en silencio. ¿Tenían miedo a las reacciones?
-No, no tenemos miedo. Las personas pueden decir lo que quieran y los estudiosos, también. Nosotros sabemos que es verdad. Es normal que alguien pueda dudarlo, pero eso no cambia nada. No queremos convencer a nadie. Tenemos mil años de historia y el tema de la Gioconda es una anécdota más. Para nosotros no es tan espectacular, no cambia nuestras vidas.

-¿Y qué les contaba su abuela?
-Que nuestra antepasada, Lisa, era la mujer del Gicondo, que tuvieron cinco hijos y que nosotros descendemos de uno de ellos, Andrea. Mi hermana y yo somos ya la decimoquinta generación en línea directa femenina. Y tenemos una prueba mayor.

-¿Cuál?
-En la colección de arte de nuestra familia existía un segundo retrato que Leonardo hizo de la Gioconda. Así figura en un inventario familiar, lo vi con mis propios ojos. El documento dice: "Dipinto di Donna Lisa Gherardini" y después "Leonardo". Es increíble, teníamos otro retrato que Leonardo hizo de Lisa Gherardini. Suponemos que no era como el que está en el Louvre.

-¿Qué se ha hecho de este cuadro?
-Un hijo de mi bisabuela vendió toda la colección pictórica en 1857. No sabemos exactamente dónde está, pero pensamos que se encuentra en una colección privada, quizás de Europa. Pero si lo supiera, tampoco lo diría.

-Supongo que está al corriente de que en Madrid ha aparecido una segunda Mona Lisa...
-Sí. ¿Tú crees que en el Prado no lo sabían hasta ahora? Me parece un poco extraño. Bueno, se è vero...

-Se anunció el hallazgo después de una restauración.
-No sé... seguramente es una copia de la escuela de Leonardo.

-La Gioconda no para de ser actualidad. Ahora el Louvre ha anunciado que hará otro estudio para determinar el año en que se pintó, y en nuestro periódico el gran falsificador y ladrón de arte, Erik el Belga, ha afirmado que el cuadro que se expone en París es una falsificación. Dice que se hizo un cambiazo a petición de una familia descendiente de Lisa Gherardini.
-No lo sé. Todo puede ser. Que la gente piense lo que quiera, no me interesa. La del Louvre puede ser una falsificación, puede ser la auténtica o una copia. He oído rumores, sí, pero lo desconozco. Leonardo llevó este cuadro a Francia, trabajó con él cuatro años y nunca lo terminó.

-¿Su abuela les explicó si Leonardo estaba enamorado de Lisa Gherardini?
-(Suspira). No lo sé. Su biógrafo y contemporáneo a él, Giorgio Vasari describía a Lisa como una persona y una madre ejemplar. No creo que tuviese una historia con Leonardo, pero nunca se sabe...

-¿Qué siente cuando contempla la Gioconda?
-Ahora no me produce ninguna emoción porque la conozco muy bien. Es como si mirase un cuadro de familia. Al contemplarla, veo una persona tranquila, serena, ejemplar y feliz en el momento en que la pintaron. Ella no hizo nada en particular, fue pintada por Leonardo y punto. Además, no creo que sea una pintura maravillosa.

-¿No le gusta?
-Sí, pero hay otras mejores. La Gioconda es linda, pero no me intriga.

-Pero tiene el misterio de la sonrisa...
-Todos piensan que ella está sonriendo, pero yo no lo creo. ¿Dónde está la sonrisa? Eso no es ninguna sonrisa, es una expresión de serenidad. Mi hermana y yo somos más guapas que ella.

-¿Se parecen a ella?
-Nuestro padre, sí. Tiene sus ojos y la boca. Sobre todo la boca. Cuando no sonríe, mi padre es igual. Todos dicen que mi hermana y yo tenemos su forma de ojos.

-La mirada es otro de los misterios del cuadro...
-Ah... (ríe). Sí, pero yo no soy misteriosa como ella. (Vuelve a reír) O quizás sí, pero a mi manera.

-¿Le agobia que últimamente no paren de hablarle de la Mona Lisa?
-Me siento cansada, sí.

-¿Piensa que ojalá Domenico Savini no hubiera hecho público el resultado de su estudio?
-No, su estudio es interesante. Entiendo que se trata de una información de interés mundial y que nunca se va a acabar.

-Supongo que prefiere hablar de su carrera como actriz...
-Me gustaría conocer a Almodóvar. ¿Por qué no? Tengo que conocerlo y a ver qué ocurre...

-Historias, para ser chica Almodóvar, no le faltan.